por Demasiado aceite de oliva
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Bienvenidos al siglo XXI, en el que la dieta baja en grasas está desapareciendo lenta pero definitivamente para dar paso a una dieta con más grasas y menos carbohidratos. Durante décadas hemos seguido el consejo erróneo de reducir nuestra ingesta de grasas al mínimo, mientras aumentamos la cantidad de azúcar en todo. Incluso una conocida marca de macarrones con queso envasados contiene azúcar añadido, lo que nos lleva a preguntarnos por qué es necesario endulzar los fideos y el queso.
La grasa es un macronutriente con muchos beneficios, uno de los cuales es la absorción de las vitaminas liposolubles A, D, E y K. También es un bloque de construcción de todas las membranas celulares del cuerpo. Proporciona energía, ralentiza la absorción de otros nutrientes (para que te sientas lleno durante más tiempo después de una comida) y es necesario para el funcionamiento saludable del hígado. Además, admitámoslo, la grasa hace que la comida sepa mejor.
Además, ¿sabías que el cerebro humano tiene más de un 50% de grasa? El cerebro necesita grasas -y especialmente ácidos grasos esenciales- para gozar de una salud perfecta. El cuerpo no sintetiza los ácidos grasos esenciales, por lo que necesita obtenerlos de una dieta saludable.
Beber aceite de oliva
Aunque la Organización Mundial de la Salud recomienda que aproximadamente el 30% de la ingesta total de un adulto provenga de fuentes de grasa, es primordial saber que no todas estas grasas son igual de saludables. Las grasas saludables son aquellas fuentes que provienen de alimentos no procesados o mínimamente procesados y que conservan propiedades que benefician al organismo, como el aceite de oliva virgen extra, que además puede ayudarte porque:
Algunos estudios realizados por científicos de Filadelfia (EEUU) han demostrado que el aceite de oliva virgen extra tiene una molécula, el oleocanthal, capaz de actuar como analgésico natural, de forma muy similar al ibuprofeno. Este componente, responsable de aportar amargor y acidez al aceite de oliva, es un agente antiinflamatorio polifenólico y, por tanto, tiene propiedades que combaten la inflamación.
Estas características del oleocanthal pueden ayudarnos a prevenir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson. Pero, además, son las propiedades responsables de que el aceite de oliva virgen extra nos ayude a protegernos de patologías como la artrosis o las enfermedades coronarias:
Aceite de oliva por la mañana
Es un remedio natural conocido desde la antigüedad, ideal para empezar el día con buen pie: una cucharadita de limón y aceite de oliva cada mañana, tomada en ayunas, puede aportar grandes beneficios a la salud. La unión de los dos elementos, ya de por sí saludables, ayuda a lubricar las mucosas del estómago, a combatir el estreñimiento y a activar la circulación y las funciones del hígado y la vesícula biliar. Además, este remedio antioxidante es capaz de liberarnos de las toxinas, purificándonos desde el interior.
Entre los beneficios conocidos del aceite de oliva está el de mejorar el funcionamiento del sistema cardiovascular. Rico en ácidos grasos, el aceite de oliva contribuye a reducir el colesterol malo en exceso, ayudando a mejorar la circulación sanguínea y a mantener la salud de venas y arterias. La adición de zumo de limón hace que el aporte de vitaminas no sea indiferente, lo que mejora aún más la función cardíaca.
Uno de los beneficios más importantes de la combinación de aceite y limón en ayunas es, sin duda, el efecto purificador que aligera el hígado. A menudo, de hecho, gracias a una alimentación poco cuidadosa, pueden aparecer molestias como la hinchazón, la boca pastosa y el sabor ácido al despertar, fuertes dolores de cabeza: todos los síntomas que muestran cómo purificarnos y desintoxicarnos.
Aceite de oliva y limón vs viagra
Hipócrates no era el único griego antiguo que cantaba las alabanzas del aceite de oliva; Homero, autor de grandes obras, como “La Ilíada” y “La Odisea”, llamaba a esta sustancia “oro líquido”, y los científicos actuales tienden a estar de acuerdo.
El aceite de oliva contiene una gran cantidad de ingredientes beneficiosos para la salud, como vitamina E, grasas monoinsaturadas, ácido oleico, fenoles vegetales biodisponibles, antiinflamatorios y antioxidantes. El aceite es un ingrediente básico de la Dieta Mediterránea, recomendada por los médicos para una serie de enfermedades crónicas, como las cardiopatías, la depresión, la demencia y las enfermedades del hígado graso, entre otras.
Estudios recientes confirman lo que Hipócrates sabía hace tiempo. Una revisión de un estudio de 2018 de la Universidad de la Sapienza de Roma examinó los resultados mundiales que confirman los beneficios del aceite de oliva como nutriente vasodilatador, antiinflamatorio y antioxidante que reduce el estrés en el sistema cardiovascular.
Otro estudio de 2018 realizado por el Centro de Medicina Específica de Género demostró que desempeña un papel curativo positivo en enfermedades inflamatorias crónicas como la artritis reumatoide, la esclerosis múltiple, el lupus, la enfermedad inflamatoria intestinal y la psoriasis.
